Para comprar el libro fuera de España, escribir a editorialuniversos@yahoo.es diciendo que quieren el libro, claro. Sale 15 euros y no se cobran gastos de envío. Quejas, otras consultas y alternativas, directamente a jgcozzolino@gmail.com, que es mi mail.

viernes, 20 de noviembre de 2009

Y otra reseña más

Gracias Eduardo.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Reseña en Clarín (España) - Muchas gracias

Click para agrandar.

viernes, 30 de octubre de 2009

Tulipanes en venta

Casa del Libro
Agapea
La Central
Rayuela
Cámara
Ojanguren
Cornión
Cervantes

Paraxuga
Internet Libros


PD: En este link pueden bajar uno de los cuentos del libro.

lunes, 19 de octubre de 2009

Reseñita


La escritora colombiana Consuelo Triviño hizo una reseña muy generosa de mi libro en el suplemento del ABC. Me enteré a través del blog de Universos. Muchas gracias a ambos.

***

Un cuento maquetado de Tulipanes para Zamudio, vía Editorial Universos.

lunes, 5 de octubre de 2009

Entrevista en Calidoscopio

J.S. de Montfort me aprecia demasiado. Gracias y disculpen si hay en mi tono algo de bobo o de arrogante o vaya a saberse de qué.

sábado, 19 de septiembre de 2009

Tulipanes en venta, Tulipanes comprados

Si ud. compró el libro, sáquele una foto y mándemela. Sería una prueba veraz del movimiento de TPZ. Si no recibo fotos, me voy a poner muy, MUY triste.
Si ud. quiere su TPZ y está en la Argentina y no entiende cómo se puede comprar sin gastos de envío el libro, escríbame, y vemos la forma de que se lo consiga.

El mail para escribirme está arriba.
Finalmente, y lo más importante, si no le gustó el libro tiene todo el derecho a mandarme un mail detallándome su enfado o su desengaño o sus ganas de amasijarme.
*
*
*

lunes, 17 de agosto de 2009

Estreno

Luego del colesterol, después de la presión raramente alta, al cabo de la crisis económica que se profundiza, llega... Problemas en el hígado.
Un hombre, su vida sencilla y falta de recursos, los consejos de algunos de su entorno acerca de lo que debe hacer y de quién debe hacerse amigo para triunfar, el rechazo a esos consejos y a cualquier consejo... y el hígado de ese hombre, vez a vez más complicado por esos consejos, las pastillas para bajar el colesterol y los problemas económicos. Problemas en el hígado. Acción, suspenso, vudú. Problemas en el hígado. Pronto, muy pronto, por esta pantalla.

viernes, 14 de agosto de 2009

Me dicen, me aconsejan, y yo apenas si respondo

"Tenés que hacerte conocer." "Vos escribís para te lean, ¿o no?" "Tenés que entregar el libro a éste, éste y éste otro." Y yo, a lo sumo: "Es mucho trabajo".
Hago medianamente caso, pero a desgano. No me interesan los clubes, ni sociales ni deportivos ni culturales. No es desprecio, por favor necesito alguien que me entienda. Es simplemente que no me interesan, me pongo nervioso, cualquier nerd se pone nervioso en lugares y ámbitos así, y soy un nerd, si quieren. El que más partidos de inteligencia podría perder en media hora. Mi memoria es patética, también mis nervios son patéticos.
Para mí, además, la literatura es en principio escribir. No importa si después mi libro no está en Palermo. Por supuesto, sería más lindo, pero no es parte ya de la literatura eso. Lo importante, a mi criterio, es jugar bien, hacer las cosas bien, preocuparme todo el tiempo y sentirme insatisfecho hasta la muerte.
Tengo seguramente poca gente que me sigue, pero es, como para Perón la voz de su pueblo, la más maravillosa música, y con eso hasta ahora puedo decir que estoy hecho.
"Vos lo que necesitás es un agente literario urgente", me dijo hace poco un amigo que algo sabe de esto. "Sí, puede ser, le dije. ¿No querés ser vos?", le dije.

Ya han pasado tres años de la muerte atroz del fatuo samurai

Recuerdo
la paciencia con que me mirabas.
(Tus calzones azules,
también recuerdo tus largos
y brillantes
calzones azules.)

viernes, 7 de agosto de 2009

Cuentos

Federico Escobar es de esos muchachos cultos, educados y precisos que no quedan. En su último texto en su blog escribe acerca de ciertos vicios en los que cualquiera, no sólo esos narradores, puede incurrir, y deja implicado no un decálago inútil y arrogante, pero sí tres máximas seguramente fundamentales. No al lirismo bajo cualquier circunstancia, no a la explicación, sí a la sencillez y la claridad. Por supuesto, hay un punto en el que me veo obligado a decir que exagera muchísimo.

jueves, 6 de agosto de 2009

Insisto

Nada es normal en estos días. No puede ser normal esta estupidez crónica de negar el amor, negar la felicidad, negar las aspiraciones legítimas de acceder a la eternidad. Y sin embargo el desdén, la indiferencia, la arrogancia, todo eso se pinta como normal. No hay lugar para la beatitud, para el chico lampiño que tiene buenos sentimientos y se llena de color si le formulan una pregunta acerca de su intimidad. No se puede ser hombre de ciencia, de cultura, fino y distinguido, si se cree en Di-s. No se puede creer en las teorías conspirativas porque eso está mal, eso lo hace a uno tonto. Está prohibido tomar posiciones medievales. Cualquier tentación de incurrir en una de esas creencias o convicciones lo transforman a uno en un fenómeno, en un freak televisivo, en un inadaptado. No hay tampoco lugar para el hombre que se levanta a las cinco de la mañana para picar pisos en una obra y está fuera, al margen, del consumo de los círculos culturales y políticos elitistas. No hay margen para enloquecer, menos aún para nacer en la exclusión. Pero todo esto, todo, se vende como normal. Se vende como normal el progresismo, la democracia y la mar en coche. Se vende como normal no desvelarse, no tener angustia, no tener miedo. Y si estás así echale la culpa a tu patología y no a los factores exógenos, que la modernidad está bien, que no hay que cuestionarle nada, tomate un clonazepam y dejate de joder. Y entonces luego cómo hacer otro tipo de libros. Libros que hablen de la pureza, la gracia, la bondad. Cómo si lo que se pretende es levantar el índice, sí, levantarlo, sí, y pontificar, decirles a aquellos que defienden la modernidad que la modernidad es una bosta. Cómo hacés proselitismo si no te disfrazas de tus enemigos. Y cómo, a la vez, hacer libros que denuncien estas cosas sin caer en el panfleto, o peor aún, libros que sean leídos como apologías de estos tiempos cuando en realidad lo que intentan es decir que estos tiempos y sus tendencias son pura mierda. Hay que ser demasiado perspicaz para lograr estas cosas, y una de mis peores sospechas es aquella que me dice que yo carezco de esa perspicacia.

Bochorno

Cada vez que me siento en este escritorio de madera chaqueña pateo la caja que hay debajo con los tulipanes llegados de España. Son muchos y son pocos. Son sobre todo pocos para tantos pedidos de gente que más me los pide por aprecio que por otra cosa. En definitiva, poco saben qué cuernos hay ahí adentro del libro. Y ya quedé como mi cara con una buena cantidad de personas, prometiéndoles mis tulipanes para luego decir ay no, lo siento, porque son más los que los piden que la cantidad que tengo, y no se puede quedar bien con Di-s y con el diablo, etc., todo ese palabrerío que, como disculpas, muchos leyeron vía mail, muchos de los muchos que me pidieron el libro y que ahora con todo derecho podrán arrojarme naranjas.
Intentaré entonces ser una estrella de rock vernácula para que todos en la Argentina puedan acceder a mí sin mayores complicaciones ni faltas de stock. Ello claro implica un riesgo no menor, el fracaso, el meterme todos los tulipanes que tengo bajo el escritorio bien en el orto. Pero les juro que haré el intento. Y mientras tanto prepararé otro libro para ver si me lo publican en Bulgaria (ya está avanzado, van unas 150 pp.)
Aparte, si usted es un joven librero argentino o un joven editor también argentino y quiere importar libros (en el primer caso) o pagar por los correspondientes derechos, en el segundo, escríbame que lo pongo en contacto con mi editor. Si usted piensa que soy medio boludón, tal vez no esté tan equivocado. Pero no me dicrimine por ser boludo, los boludos también votamos.

miércoles, 5 de agosto de 2009

Se llevaron TPZ a la playa

Y no se nubló.

pd: El sueño con Luisa Albinoni fue perturbador. Me pasó algo que le pasó a Barreda, los que tienen memoria seguramente recordarán qué le pasaba a Barreda, es la parte de su declaración donde tartamudea. Yo era como un extra, porque todo sucedía en una película que existe, que se llama "Viaje de una noche de verano" o algo así, donde no actúa Luisa Albinoni pero sí Alberto Olmedo (todavía con pelo) y en un papel ultra secundario. Es una película ATP, nada prohibido, y en el sueño yo estoy tirando unos cables y de pronto soy aire y me meto en el cuerpo de Olmedo y la agarro a Albinoni detrás de un decorado. Había momentos en que Olmedo (es decir, yo) dudaba si seguía ahí Albinoni o era Diana Maggi (que sí actúa en esa película), es decir, el mismo Olmedo se preguntaba "cómo puede ser que esté con Luisa Albinoni si no trabaja en esta película, ¿no será Diana Maggi?", y era absurdo porque Diana Maggi no tiene nada que ver con Albinoni, son dos mujeres totalmente distintas, una, además, podría ser la madre de la otra.

Días últimos


Los 20 ejemplares de TPZ que fui a buscar a unas oficinas horrendas del Correo Argentino en Retiro
(donde te atienden para la mierda y donde cantan números para ir en busca de los pedidos con una desconsideración hacia coreanos y chinos que llama la atención
-ahí se veían a mis pobres amigos orientales tratando de saber qué mierda decían en el parlante cuando un empleado del correo ahora nuevamente estatal decía "seiscientos veintidós mil novecientos treinta y ocho",
porque hay que ser hijo de puta en serio para no tener un cartel o una pantallita donde el chino o el coreano puedan entender si les toca o no les toca su turno-),
decía que fui a buscar esos ejemplares a Retiro y que desde entonces colesterol, presión alta y una merma significativa del trabajo me persiguen.
No obstante ello, y como debo caminar (el médico me dijo que haga ejercicio, que no fume, que evite las grasas animales), ya dejé un ejemplar a Sonia Budassi, que, para quienes no la conocen, es una escritora/editora/periodista que estudió en la misma facultad que yo y a quien yo jamás vi, y ya pienso hacer lo mismo con otro editor (que me conoce un poco más, creo, algo ha visto en Hermanocerdo) y con un par de amigos (no puedo ni me da vender por mi cuenta los pocos libros que tengo, no me sale, me da vergüenza, pudor).
Pero lo más importante —ycomo me viene sucediendo desde hace ya años— no pasa en la Argentina, sino por ejemplo en México. Y son por ejemplo mensajes como los de Ana LMR los que me dan alguna tranquilidad acerca del sentido de TPZ, porque, a todo esto, un puto libro tiene que tener un puto sentido. Y esa mexicana un poco me habla de eso en su mensaje. En fin, ese es el contenido de los últimos días, o casi todo el contenido.
También soñé que era Alberto Olmedo y que tenía relaciones íntimas con Luisa Albinoni. Y también me cuesta muchísimo dormir pensando en Di-s, en la condición de mortal que tengo y que tienen todos los que me rodean, y en la guita. En la guita por sobre todas las cosas como garante principal del estado doméstico de bienestar. Buenas tardes a todos.

pd: Otras cosas buenas: las fotos de Montfort (otro que le chingo al apellido) de TPZ en Barcelona, la generosidad eterna de J. Moreno y M. Salvador, el exagerado afecto de D. Espartaco, la irrupción de L. Reyes desde Cuba, los chats esporádicos con Juan Dicent y uno muy entretenido con el premio nacional de poesía en RD (qué joder), Frank Báez, más el formato lindísimo de TPZ en tanto libro (mérito absoluto de Gayol, un hombre valiente que se atrevió a publicarme)... de eso también hubo en estos últimos días.
Si yo soy el cantante rengo y con asma y ellos son de algún modo mi público, entonces debería darles las gracias por el aliento, porque no saben lo mucho que me cuesta cantar y lo enemistado que estoy conmigo a diario.

domingo, 26 de julio de 2009

Responsable de contenidos II

Un tema que siempre me ha preocupado (y ya veo a los moralistas apuntándome con sus bayonetas): la relación entre la ética y la estética y más específicamente la relación entre la literatura y la moralidad. Seguramente causen a la vez gracia estos planteos en aquellos que creen que la modernidad existe y que el progreso también, tanta gracia como fastidio seguramente les cause a los moralistas del paréntesis. Pero es así, al margen del escenario de burla y amenaza que me imagino (soy decididamente paranoico, especialmente la amenaza y el señalamiento es lo que TPZ y sus tapas duras me proyectan), al margen de todo eso, decía, la moralidad de mis actos y, naturalmente entre ellos, de lo que escribo, es una preocupación que no me deja dormir. Son las 3.29 de la madrugada de este lunes. Tengo que trabajar en unas cinco horas más. Y hacer trámites. Y etcétera.
Es que no puedo deslindarme de esa preocupación ni creo que sea bueno hacerlo. Me veo tentado, por ejemplo, de advertir a una mujer no tan joven interesada en mi obra desde siempre (acaso, mi única verdadera fan), que tenga en cuenta que TPZ contiene lenguaje adulto, agresivo, y que cuenta con imágenes donde abunda lo sórdido (y ojalá al menos sea eso y no la mera sensualidad por la sensualidad misma). Y si bien sé qué es lo que quise exaltar en cada cuentito y en el libro como tal, dudo ahora de si lo hice realmente bien, y ahí está el asunto. (También convencido estoy de que a cierta gente TPZ le resultaría antes una agresión, una ofensa, y no me enorgullezco de eso, antes que eso me puteo porque no me gusta joder a nadie y sé que en alguna medida a cierta gente tarde o temprano terminaré jodiendo.) Sé que no soy un pornógrafo ni que lo quiero ser, y que vengan las mofas a este temor de ser eso, pero ese temor es real. Sí sé que soy horriblemente escatológico y vulgar, y que ahí hubo hasta intención de mi parte, no me voy a lavar las manos, pero no delectación, no disfruté, muchachos, para nada, con ciertas escenas llenas de pesadumbre. Que hay sexo, sí. Hay sexo triste todo el tiempo. Yo veía por televisión los pozos petroleros y veía sexo, ya me pasaba de chico. Veía un tornillo atornillado y veía sexo. Pero eso no quiere decir nada.
En fin, todo esto es muy confuso. Y no quiero aclarar u oscurecer más nada, sé que estoy intentando justificarme de algo que me atormenta. Sé que me aflora un puritanismo raro (no lo voy a calificar de otro modo, háganlo ustedes, se sorprenderían ustedes si yo por estas vías me sincerara, para eso estuvieron mis cuentos, caramba, pero un cuento no es un panfleto, y estamos otra vez en el mismo problema). Sé también que, por ejemplo, fíjense esto, mis hijos ven el libro (y yo suelo leerles a mis hijos, otros libros, claro), y ellos me piden que les lea algo, y yo apenas puedo con dos oraciones, no avanzo más, no se puede, no es para ustedes, chicos, les digo. ¿Por qué? ¿Porque es para grandes? Y con mis mayores y mi círculo más íntimo sucede algo parecido. No puedo hacerlos partícipes de esto. La linealidad con que leerían ciertos cuentos los deprimiría, los preocuparía muchísimo, y yo no puedo andar exigiéndole a la gente que lea "de manera calificada", ¿quién mierda soy yo (y vean lo mal hablado que soy) para darle ese tipo de consejos a la gente? La gente está en su derecho de ofenderse. TPZ no es la Biblia, es apenas un triste libro. Realidad modificada, ficción. Un poco de tomates y zanahorias que encontré en la heladera, pero que ahora son una salsa. Cosas que no todo el mundo comprende, no todo el mundo especialmente cuando conoce demasiado bien a esos tomates, a esas zanahorias, a la mismísima heladera.

jueves, 23 de julio de 2009

Responsable de contenidos

No sé cómo hacen otros cuando escriben, calculo, sí, que tienen una actitud más sensata, y que lo que cuentan de alguna manera lo sostienen. No digo que todos lo hagan así, pero intuyo que muchos hay ciertas cuestiones que las toman como normales y punto. Hablo del relato de lo cotidiano, de lo nimio, de eso hablo: de comer, copular, dormir, trabajar... Y no es mi caso. Yo no sostengo ni lo que digo ni lo que escribo, soy absolutamente inconsistente, si se quiere. Me pongo a escribir como un boludo y el boludo me gana, me hace escribir cosas que no quiero. Y no hay media coma que considere normal en TPZ, no hay medio párrafo que no me moleste para siempre: hay cosas que incluso pueden pasar desapercibidas y no voy aquí a aclararlas, sólo puedo decirles que el epígrafe que le metí a TPZ a último momento fue un intento desesperado por pedirme disculpas, por redimirme. Y no hablo de cuestiones de estilo. Ojalá la literatura fuera tan solamente una cuestión de estilo. Hablo de lo que se puede decir y hacer con la literatura, del alcance que pueden tener tus palabras, de sus implicancias y de sus consecuencias. Y es de ahí que me sobreviene una inquietud horrible, del descontrol en el que ya está TPZ sumergido, descontrol en el que nada desde que TPZ era un borrador aislado puesto en HermanoCerdo por la generosidad de gente que hoy estimo y hasta el cielo y que sin embargo sigue siendo para mí extranjera. Repasando algunos textos ahora que me llegó el libro me queda la resaca que los pecadores arrepentidos tienen tras sus pecados, y espero que así le pase al resto cuando abra el libro, y a la vez sé que no debo esperar nada y que nada de eso cuando lo escribí lo dejé demasiado claro, para no irme en explicaciones, para no hacer un tratado. A mí realmente les digo me gustaría que TPZ fuese identificado como un libro entretenido. Y punto. Dudo acerca de si es entretenido, hay quienes dicen que sí. De lo que no dudo es de que me molesta. Me da gracia cuando dicen de un autor "tiene un estilo perturbador". Si yo soy otro distinto del que escribió TPZ, el tipo que escribió TPZ entonces es un tipo que a mí me perturba, que no lo aguanto.

martes, 21 de julio de 2009

Librería La Central, Barcelona, España


Gracias a JSM.
Para el que esté en Barcelona, el link.

lunes, 20 de julio de 2009

Poco a poco todo va cobrando alguna forma

Así, por ejemplo.
¿Qué foto irá? Lo desconozco. Espero que vaya esa con bañador, como dicen por el norte, donde estoy luciendo mi torso trabajado.

sábado, 18 de julio de 2009

Livros

A la espera.

Caetano Veloso - Livros
Found at skreemr.com


Tropeçavas nos astros desastrada
Quase não tínhamos livros em casa
E a cidade não tinha livraria
Mas os livros que em nossa vida entraram
São como a radiação de um corpo negro
Apontando pra a expansão do Universo
Porque a frase, o conceito, o enredo, o verso
(E, sem dúvida, sobretudo o verso)
É o que pode lançar mundos no mundo.


Tropeçavas nos astros desastrada
Sem saber que a ventura e a desventura
Dessa estrada que vai do nada ao nada
São livros e o luar contra a cultura.


Os livros são objetos transcendentes
Mas podemos amá-los do amor táctil
Que votamos aos maços de cigarro
Domá-los, cultivá-los em aquários,
Em estantes, gaiolas, em fogueiras
Ou lançá-los pra fora das janelas
(Talvez isso nos livre de lançarmo-nos)
Ou ­ o que é muito pior ­ por odiarmo-los
Podemos simplesmente escrever um:


Encher de vãs palavras muitas páginas
E de mais confusão as prateleiras.
Tropeçavas nos astros desastrada
Mas pra mim foste a estrela entre as estrelas.

lunes, 13 de julio de 2009

Aclaración

Tulipanes no es mi primer libro.
Hubo otro, digamos. Hace 12 años.
Eso, por supuesto, no quiere decir nada. O sí. Que hace 12 años era un joven promisorio. Que, luego, dejé de ser joven y promisorio.

Propaganda

Daniel Espartaco, que es algo así como mi agente propagandístico más radical, ya encargó su Tulipanes desde México. Y también lo hizo, pero en Barcelona, según me cuenta vía Facebook, J.S. de Montfort, lo que asegura difusión de Tulipanes en más de una fiesta y en más de una chica.

miércoles, 8 de julio de 2009

Tulipanes internacionales

Dice la Editorial Universos:
Debido a la reciente publicación de Tulipanes para Zamudio, de Javier G. Cozzolino, y del enorme interés despertado al otro lado del Atlántico, la Editorial Universos anuncia que la distribución internacional se realizará a través de internet.
La compra se efectuará por medio de un correo a editorialuniversos@yahoo.es donde se facilitarán los datos necesarios para finalizar la transacción.
El precio de los libros será el mismo que el existente para el mercado español (en el caso de Tulipanes para Zamudio, 15 €). Los gastos de envío corren por cuenta de la editorial.

A los argentinos que observen que el cambio de euros a pesos no les conviene, no piensen, escriban a editorialuniversos@yahoo.es y pongan en el mensaje "Quiero mi Tulipanes ya".
Si acaso no están convencidos, razonen lo que este reformador social inglés, John Ruskin, decía una centuria atrás:
No hay casi nada en el mundo que no pudiese hacer alguien un poco peor y venderlo algo más barato. Y las personas que solamente deciden a causa del precio serán las víctimas de tales manipulaciones. Es poco inteligente pagar demasiado, pero aún es peor pagar demasiado poco. Si paga de más, pierde algo de dinero, esto es todo lo que pasará. Pero si en cambio paga de menos, a veces pierde todo, ya que el artículo comprado no puede corresponder a su finalidad. La ley de la economía prohíbe recibir un valor alto por poco dinero. Si acepta la oferta más barata, tiene que añadir algo por el riesgo que corre. Y si lo hace, entonces también tiene bastante dinero para poder pagar por algo mejor.

martes, 7 de julio de 2009

Algunos lugares donde comprar Tulipanes

Encuentro que en Agapea (primera vez que escucho ese nombre, pero ha de ser la mejor librería del mundo) venden TPZ.
Luego hay otras librerías, pero que deben haber copiado mal el ISBN. En ellas, Tulipanes figuran editadas por Capitan Swing y no por Universos.
Este análisis de comercialización de TPZ fue realizado por mi secretaria. Lo sigue luego.

viernes, 3 de julio de 2009

Nota de prensa para TPZ

Recién leo esta pequeña presentación del libro. Más allá de los elogios, me ha alegrado mucho que el texto comprenda cierta finalidad que yo tuve al momento de escribir lo escrito.

EDITORIAL UNIVERSOS presenta el libro de relatos Tulipanes para Zamudio, de Javier G. Cozzolino, y acompañamos la nota de prensa para todos aquellos que quieran anticipar el contenido del libro.

NOTA DE PRENSA

miércoles, 1 de julio de 2009

Algunas cosas que Javier y Mónica, su compañera, hicieron en Madrid

(Incluye la busca fatua de Tulipanes para Zamudio, que ya llegará, que se hace desear, y la felicidad de haber dado con las obras completas —¿o eran los cuentos?— de Onetti).
Acá el link al viaje del matemático y la científica.

jueves, 25 de junio de 2009

Sí...

Se está demorando un poco. Pero ya tendría que llegar.

viernes, 19 de junio de 2009

El álbum fotográfico de TPZ

Aquí una foto.

***

Al margen, reproduzco mi diálogo de recién con otro Javier, apenas censurando aquello que no es políticamente correcto o que se refería a Tulipanes para Zamudio.

me: la verdad es que lo peor de la literatura son los escritores

Javier: jajajaja vi tu comentario

me: y justamente el post q puse ayer en mi blog fue una reacción a lo de etiqueta negra

Javier: lo bueno y malo de hermanocerdo es que nadie nos presta atención

me: es que eso es intencional

Javier: ?

me: y por eso no me interesa esa gente

(((material censurado)))

me: saben qué es hermanocerdo (((censurado cobardemente)))

Javier: ok

(((brutal censura)))

me: un tipo que hace años dice y hace decir que viene preparando un libro de relatos

Javier: oh jajaja como yo :P

me: y q llegó (((censura))). no lo envidio, me molesta cierta actitud de gueto de esta gente. la literatura es una verga si uno se fija en los escritores, en serio. los escritores no suelen ser buena gente

Javier: sí, de eso hablaba con antonio ungar, un escritor colombiano que estuvo de visita por acá

me: son miserables, ruines, te matan por salir en una revista, por una reseña

Javier: pero igual, no viene mal reclamarles por su pedantería de cuando en cuando.

me: obvio, eso lo dice maschwitz
pasa que maschwitz es radical

Javier: jaja

me: habría que amenazarlos de muerte

Javier: tú lo conoces mejor que yo

me: poco, pero los grupetes literarios son penosos, cerrados. en este puto país todo pasa en buenos aires, y más exactamente en palermo, es triste

Javier: como en todas partes, javier. esos grupos se concentran en áreas pequeñas. pero la historia ha demostrado que no todo tiene que salir de esas áreas pequeñas :)

me: no sé, a veces siento que en hermanocerdo estamos los chicos buenos del rock

Javier: hablando de cosas....

me: el problema es que el rock candoroso nunca fue un éxito

(((censura final donde me doy cuenta que soy un marica)))

me: je pero bolaño era de otra especie por eso es lo que es

Javier: de pronto le hubiera gustado hermanocerdo :)

me: son tipos más llanos. q no se toman en serio a la literatura xq antes hay cosas más importantes q la literatura. el problema de estos tipos tipo (((censurado el otro tipo de tipo al que me refería))) es que creen que en la literatura está la fama y en la fama el olimpo

Javier: pos sí

me: en fin, no saben que uno se muere y que lo comen los gusanos... (((acá hubo otra edición más del censor))).

miércoles, 10 de junio de 2009

15 de junio, más o menos, el día D

Tulipanes para Zamudio, ese grupito de cuentitos que tantas vueltas dio, el 15 de junio tiene bandera de largada. Ojalá sirva para entretener y evangelizar, o al menos para una de las dos cosas.
Digamos que este blog es una herramienta de autobombo elemental. Digamos también que comienza a ser el diario de viaje de un libro que me generó muchas contradicciones, que me dejó en muchos tramos muy insatisfecho y que en otras logró que Zamudio se pareciera demasiado a mí.
Estará a la venta, en principio, en librerías de todo el territorio español (léase por "territorio español" a "toda España"). Pero Editorial Universos, los cerdos que me apañan y tipos realmente generosos como éste haremos el intento de al menos hacer pie en México y, con suerte, en la Argentina.
En fin, veremos cómo camina el asunto.